Diez razones por las que una buena gestión y archivado de los contenidos audiovisuales pueden hacer tu vida más fácil
Si algo caracteriza la época en la que vivimos son los cambios rápidos y constantes. Esto significa que, sin hacer prácticamente nada, artículos fundamentales de nuestras vidas desaparecen y reaparecen con una forma completamente diferente.
Una consecuencia sorprendente de la vertiginosa velocidad con que se suceden los cambios es que los contenidos de vídeo, audio y los metadatos, ahora son independientes del medio utilizado para la grabación. Actualmente nuestra forma de almacenar e intercambiar contenidos audiovisuales es un archivo. Los archivos ya no se encuentran intrínsecamente vinculados a los dispositivos en los que están almacenados, como ocurría en la época de la película, el vinilo o la cinta. Un archivo consta de un conjunto de números y, por lo general, es el orden y el tamaño de dichas cifras lo que determina la naturaleza y contenido del archivo, no las características físicas del soporte en el que se graba. En muchos aspectos, la posibilidad de copiar los archivos y almacenarlos en cualquier tipo de soporte compatible resulta muy útil. Pero esa flexibilidad superior implica una mayor probabilidad de perder tu contenido o que simplemente no consigas encontrarlo cuando lo necesitas. Por eso la gestión y el archivo de contenidos audiovisuales es tan importante. Se trata de uno de esos aspectos en los que no se suele pensar mucho hasta que realmente se necesita.
1. Ahora es más fácil: El equipo y el software han mejorado
La tecnología debe simplificar las tareas, no hacerte trabajar más. Toda la tecnología necesaria para simplificar la gestión de contenidos multimedia está aquí y ahora, y existen excelentes sistemas de archivo como el Optical Disc Archive de Sony. Ahora es el mejor momento para utilizarlo. Todo lo que necesitas está allí. Sencillas operaciones de arrastrar y soltar. Manejo transparente de códecs y proxies. La gestión de contenidos audiovisuales está más próxima que nunca al ideal, que consiste en ayudarte a trabajar mejor sin interferir en lo que estás haciendo.
2. Tus contenidos multimedia son valiosos y no quieres perderlos.
Es una conclusión a la que se llega sin demasiadas elucubraciones. Tus contenidos son como mínimo tan valiosos como el tiempo que te ha llevado crearlos y probablemente mucho más que eso. Imagínate tener que volver a grabar algo otra vez. Ahora piensa que tienes que grabarlo pero no puedes porque era una ocasión única. Catástrofes aparte, ¿qué ocurre si necesitas recuperar ese vídeo de un atardecer perfecto pero no logras encontrarlo porque está en un disco duro que es igual al resto de tus discos duros, y porque en lugar de llamarse «Increíble atardecer rojo» se llama «fp3xh883hxx_»? Nunca lo vas a encontrar. La gestión de archivos multimedia puede evitar incluso que lo pierdas en primer lugar. Un sistema de archivo lo almacenará en un lugar seguro por ti (durante 50 años en el caso del Optical Disc Archive de Sony).
3. La mayoría de los usuarios guarda sus contenidos multimedia en discos duros a largo plazo. No lo hagas; no es seguro.
Los discos duros son fantásticos. Son rápidos y relativamente baratos, además de ofrecer grandes capacidades. Son tan baratos que se utilizan igual que antes se usaban las cintas máster. Además, resultan bastante fiables, sobre todo con un sistema de RAID. Pero si, al igual que el otro 50 % de los usuarios, empleas únicamente discos duros como almacenamiento a largo plazo, ya te puedes ir preparando para ser víctima de pérdidas devastadoras. Los discos duros están fabricados para el presente, no para dentro de cinco años. De las nueve unidades que hemos tenido durante al menos cinco años, siete han dejado de funcionar. Esta no debería ser la base de tu estrategia de almacenamiento a largo plazo. Optical Disc Archive de Sony es un soporte de almacenamiento sólido y a largo plazo.
4. Puede facilitarte el trabajo al proporcionarte acceso continuo a tus cosas.
¿Recuerdas cuando tenías que levantarte del escritorio para buscar cintas, discos o incluso tarjetas de memoria individuales en busca de un clip que querías usar en tu actual proyecto? Y eso suponiendo que supieras dónde estaba. ¿Qué ocurría cuando no tenías ni idea de dónde se encontraba el clip? Con una herramienta de gestión de contenidos audiovisuales adecuada, como Media Navigator de Sony, puedes realizar búsquedas mediante texto o visualmente. En cuanto hayas encontrado el clip, arrástralo a tu línea de tiempo sin tener que preocuparte por formatos o códecs. Puede parecer un sueño, pero está ocurriendo aquí y ahora.
5. Podrás trabajar con versiones de los contenidos en resoluciones inferiores utilizando proxies.
Los contenidos en alta resolución equivalen a archivos enormes que pueden ralentizar tu equipo y la red. Perderás un tiempo valioso esperando a que los archivos se carguen y podrás hacer menos en tiempo real. Con un sistema de gestión de contenidos multimedia adecuado, podrás trabajar con archivos proxy (estos son los archivos que siguen dando buenos resultados en tu línea de tiempo, pero que ocupan mucho menos espacio) y, a continuación, volver a conectar con los archivos de máxima resolución cuando termines. No pierdes nada y ganas agilidad a la hora de trabajar. Toda la complejidad se oculta tras el sistema de gestión de contenidos multimedia.
6. Los dispositivos de archivo adecuados conseguirán que tu contenido dure más tiempo.
Ya hemos visto que los discos duros no han sido diseñados para durar mucho. Independientemente de lo bien que se fabriquen (y los discos modernos son de lo más rápidos y fiables), nunca pueden ser un buen lugar para almacenar contenidos a largo plazo. Incluso el campo magnético terrestre puede degradar gradualmente la información almacenada en ellos, que acabará volviéndose ilegible. Todos los discos duros dejarán de funcionar mecánicamente. Y ese será el fin de los datos. Con el Optical Disc Archive de Sony, tus contenidos multimedia durarán al menos unos 50 años.
7. La gestión de contenidos multimedia incluye prácticas recomendadas de funcionamiento.
Por ejemplo: no te permite adquirir malos hábitos. Pasar un par de horas asignando nombres a tus archivos, con descripciones significativas, te ahorrará muchas más horas en el futuro cuando puedas encontrar lo que buscas al instante y, unos cuantos segundos después, verlo en tu línea de tiempo. Compara eso con tener que buscar entre veinte mil archivos denominados «archivo 1» – «archivo 20 000».
8. Te aísla de la complejidad de lo que sucede en un nivel inferior.
Igual que el sistema operativo te protege de la complejidad de lo que ocurre en el interior del ordenador mediante una intuitiva interfaz gráfica, el sistema de gestión de contenidos multimedia funciona como el sistema operativo de tus contenidos multimedia. Te protege de las complejidades de formatos, códecs, resoluciones y todo tipo de elementos con los que no quieres tener que lidiar en tu edición o posproducción diaria. Media Navigator de Sony simplifica el proceso de protección de tu contenido multimedia. Realiza el seguimiento de esos miles de archivos y te proporciona acceso rápido a ellos, directamente en tu línea de tiempo.
10. La gestión de contenidos multimedia adecuada funciona de forma integral. Se convierte en tu flujo de trabajo.
La gestión de soportes no es un elemento que simplemente se acopla al flujo de trabajo, Se convierte en tu flujo de trabajo. Se trata de un sencillo ayudante para facilitarte el trabajo y mejorarlo. Te protege frente a pérdidas y encuentra el contenido que necesitas casi al instante. Se trata de uno de esos raros ejemplos en los que te preguntas cómo has podido vivir sin él hasta ahora. Media Navigator y Optical Disc Archive de Sony se combinan para simplificar la protección de tus contenidos multimedia y permitirte encontrar rápidamente lo que necesitas. Calcula el valor que tienen tus contenidos multimedia y lo lejos que llegarías para protegerlos. Sony está aquí para ayudarte.
