Goodwood Estate abraza la oscuridad con la BURANO

Introducción

La famosa finca Goodwood Estate recibió a un misterioso invitado en uno de sus exclusivos eventos para socios. El productor de vídeo Jonathan Scrivens vio la oportunidad de rodar una historia de fantasmas desenfadada con el CanAm Shadow como protagonista y la cámara de cine BURANO de Sony para captar cada detalle del ambiente.

El invitado misterioso

La finca Goodwood Estate es famosa por sus eventos anuales, y el Festival of Speed es el más importante. Aunque para muchos aficionados del automovilismo es el evento más destacado del año, los miembros del Goodwood Road Racing Club también tienen su propio evento exclusivo para socios. Y el «misterioso coche invitado» para la edición de 2024 intrigó tanto a Jonathan Scrivens que tuvo que hacer una película sobre él. Que pase el CanAm Shadow.

Al investigar sobre el equipo Shadow Racing Cars, Jonathan se dejó llevar por las historias sobre este coche extraordinario y el enigmático propietario que tuvo el equipo en la década de 1970, por no mencionar el aspecto sorprendente del propio Shadow. Decidió rodar un cortometraje con una atmósfera con un toque fantasmagórico para promocionar la oportunidad única de presenciar un Shadow en el próximo evento de Goodwood exclusivo para socios.

Tras utilizar la FX9 como cámara principal para el equipo de vídeo de Goodwood durante varios años, Jonathan habló con el equipo de Sony y aprovechó la oportunidad de probar la cámara de cine BURANO.

Suelo centrarme en dirigir, más que en manejar las cámaras. Pero, para la sesión con el Shadow, quería ponerme a trastear la BURANO.

Jonathan Scrivens

Primer plano de la cámara de cine BURANO con el coche de carreras CanAm Shadow y el equipo al fondo

Útil, portátil y fiable

Cuando llegó el día del rodaje, el atractivo y la practicidad de su nueva cámara de cine, la BURANO, se hicieron patentes al instante.

«Tras una hora utilizando la BURANO por primera vez, fue como si la hubiera estado usando toda mi vida», dice Jonathan. «Eso significaba que podía ponerme a rodar directamente. Sabía moverme por los menús y los ajustes de forma automática». A otros operadores de cámara les sorprendió lo fácil que era manejar la BURANO. Incluso un usuario principiante de la FX3 descubrió que podía dominar la BURANO rápidamente.

Su inmediata facilidad de uso no fue el único motivo por el que la BURANO encajó a la perfección en el rodaje de Goodwood. Su tamaño compacto permitió a Jonathan, uno de los dos operadores de cámara principales, llevar la cámara bajo el brazo con la misma facilidad que al hombro para rodar las tomas de seguimiento. Además, era lo suficientemente ligera como para rodar cómodamente sentado en la parte de atrás de un 4×4 para grabar al Shadow mientras circulaba por la finca a 80 km/h.

En este caso, la función de estabilización de imagen integrada en el cuerpo (IBIS) de la BURANO fue indispensable. Jonathan descubrió que podía hacer zoom a la cara del conductor desde 200 m y seguir obteniendo tomas nítidas y fluidas. A ello contribuyó aún más el hecho de rodar con una gama de objetivos G Master de Sony que incluía objetivos de 24 mm, 50 mm y 85 mm y un zoom de 70-200 mm a F2,8. Dada su impresionante estabilización y su diseño compacto, es posible que en futuros rodajes Jonathan monte la propia BURANO en la parte delantera de los coches: «La función IBIS me dejó impresionado, ya que ofrecía muy buenos resultados sin tener que usar apenas la estabilización durante la edición».

Por si no hubiera que tener en cuenta bastantes cosas el día del rodaje, la lluvia fue prácticamente constante durante todo el día. Sin embargo, gracias a las resistentes cámaras de Sony, a Jonathan no le preocupaba poder perder tomas o que tuviera que retrasarse porque una cámara estuviera algo húmeda:

«He utilizado suficientes cámaras de Sony como para saber que son lo bastante robustas como para luchar contra las condiciones climáticas. En la segunda mitad del día, se produjeron las peores lluvias del año. Sin embargo, las cámaras de Sony siguieron funcionando sin problemas. En ningún momento me preocupó que las cámaras no pudieran resistir el mal tiempo».

Primer plano de un operador grabando con una cámara de cine BURANO

La BURANO nos viene como anillo al dedo, ya que nos ofrece una calidad de imagen increíble y su cuerpo nos permite poder transportarla fácilmente en jornadas de 16 horas de rodaje.

Jonathan Scrivens

Captar la emoción de la velocidad

Durante la producción, la BURANO contó con el apoyo de las cámaras FX3 y FX6 de Sony. La cámara FX3 supercompacta se montó en la parte delantera del Shadow para conseguir tomas fijas del conductor. Mientras tanto, las tomas aéreas se consiguieron con la cámara FX6 montada en un dron, para garantizar que el equipo de vídeo de Goodwood obtuviera una amplia variedad de tomas.

Cuando los editores recibieron todo el material de vídeo, los archivos 8K X-OCN de la BURANO se ajustaron fácilmente al color de las cámaras FX6 y FX3, lo que facilitó la tarea de mantener la estética inquietante que buscaba Jonathan. El equipo de posproducción descubrió que podía trabajar con más espacio de color y latitud de lo que esperaba.

Cámara ILME-FX6 montada en un dron junto a la cámara BURANO de Sony

«Ya habíamos rodado en 6K, pero era la primera vez que trabajábamos en 8K y fue nuestra primera experiencia con X-OCN», dice Jonathan. «Teníamos un calendario de producción muy apretado y rodamos en todas las condiciones lumínicas, incluida una escena nocturna que utilizaba únicamente una hoguera para la iluminación. La BURANO no nos decepcionó».

Debido al estrecho margen de tiempo y a la poca experiencia previa con X-OCN, el equipo de posproducción se sintió intimidado al principio. Sin embargo, con X-OCN LT, el tamaño de los archivos era un 60 % menor que el de los archivos RAW a los que el equipo estaba acostumbrado. Por lo tanto, su inquietud se convirtió en alegría cuando vieron la cantidad de detalles que el formato X-OCN LT había conservado en las tomas más oscuras, por no hablar de los colores, que seguían intactos, desde las tomas iluminadas por el fuego hasta las escenas de carreras a plena luz del día.

«El espacio cromático tan amplio de X-OCN significaba que los editores tenían mucho con lo que jugar. Sin grano, sin manchas oscuras y con mucha flexibilidad para la gradación».

A la larga, el plan de Jonathan es que este cortometraje sea el punto de partida de un documental de larga duración sobre el CanAm Shadow, que espera rodar también con la BURANO.

Si de mí dependiera, todos los rodajes que tengamos en el futuro se grabarían con la BURANO.

Jonathan Scrivens

Coches de carreras CanAm Shadow y el equipo de producción en el exterior de la finca Goodwood House