Listos o no, la inteligencia artificial ha llegado
Stuart Almond, responsable de Intelligent Media Services, Sony Europe
IA: reduce las incoherencias e impulsa el valor
Inteligencia artificial por aquí, IA por allá… Suena bien, ¿no? Sin embargo, a menudo hablamos de la domótica como si fuera IA, así que vamos a aclarar este concepto antes de zambullirnos en la adopción de estas tecnologías para el sector de las emisiones.
El debate sobre lo que define exactamente a la inteligencia artificial sigue abierto. En primer lugar, está la domótica, que hace referencia a los algoritmos de un sistema que no requieren intervención humana. Los análisis de datos, que pueden revelar patrones, las tendencias de mercado actuales y futuras, y las recomendaciones. La IA no debería confundirse con la domótica, a pesar de que ambas utilizan inteligencia para proporcionar nuevos niveles de eficiencia, reducir las incoherencias e impulsar el valor en aquellos lugares donde no existe actualmente.
En qué punto nos encontramos
En la actualidad, el sector de las emisiones se encuentra al principio del proceso de adopción de la inteligencia artificial. En una encuesta reciente a usuarios finales de IABM, se puso de manifiesto que solo el 8 % de los compradores de tecnología multimedia afirmaban haber adoptado la inteligencia artificial antes de septiembre de 2017, un 56 % declaró que posiblemente la adoptaría en los próximos 2 o 3 años y un 36 % informaba de que era improbable que la adoptasen. Cuando la gente dice que la adopción de la IA va lenta tienen razón. No obstante, por muy lenta que sea, es progresiva y no cabe duda que la IA está aquí para quedarse. La pregunta que debemos hacernos es cómo podemos integrarla en nuestros flujos de trabajo desde el inicio de la producción de contenidos hasta la distribución final.
Amenazas en el ámbito actual de los contenidos
Nielsen Total Audience Report muestra que los adolescentes y los «millennials» jóvenes, de entre 18 y 27 años, ven un 40 % menos la televisión que hace cinco años. En el caso de los «millennials» de mayor edad, de entre 28 y 36 años, se trata de un 25 % menos. Por supuesto, la forma en la que consumimos contenido también está cambiando, lo que significa que los consumidores han desarrollado el deseo de obtener servicios más personalizados y completos, por lo que es esencial que las empresas del sector audiovisual se adapten a sus expectativas si quieren mantenerse a la cabeza del mercado. La IA es, sin duda, el lugar hacia donde se dirige el sector pero, como todo lo nuevo, conlleva retos y preguntas a los que es preciso dar respuesta.
La programación es compleja y requiere mucho tiempo, lograr que un concepto se haga realidad puede tardar hasta 18 meses, lo que posiblemente explica por qué algunas empresas se muestran reticentes a adoptar estas tecnologías. 18 meses puede ser una cantidad de tiempo considerable para que el sector asuma un cambio drástico. Ahora viene un tema delicado, que seguro ya se te ha pasado por la cabeza… La IA no debe considerarse como una forma de «deshacerse de trabajadores». La automatización y la IA son pilares fundamentales para alcanzar un futuro en el que el aprendizaje profundo sea el protagonista. Para tomar las decisiones adecuadas, es un requisito imprescindible que las empresas cuenten con expertos que trabajen con la IA, a fin de ofrecer el contenido más atractivo a su público.
Mantener el ritmo de los gigantes del audiovisual
Competir con los principales nombres en el ámbito de los servicios de transmisión, como Netflix y Amazon, puede ser todo un desafío en el panorama de contenidos actual. Estos proveedores buscan constantemente nuevas fórmulas y tecnologías para mejorar sus servicios, así como proporcionar las mejores recomendaciones a sus clientes. Mediante el entrenamiento de su software con redes neurales, crean una simulación artificial de cómo el cerebro humano identifica patrones. Netflix ha desvelado que consigue ahorrar mil millones de dólares al año gracias a la capacidad de la tecnología de IA para automatizar los flujos de trabajo y reducir la pérdida de clientes. Las cadenas y empresas del sector audiovisual necesitan transformar su forma de distribuir contenido, empezando por la enorme cantidad de datos que almacenan.
Noticias e inteligencia artificial
Los medios de comunicación también están aplicando la IA para permitir flujos de trabajo más flexibles. En esta época en que el periodismo ciudadano está en auge, ayudado por la era digital, los medios de comunicaciones deben superar sus propios límites para conseguir distribuir las noticias. Mediante el uso aplicaciones como el reconocimiento de voz, el reconocimiento facial o la edición de correcciones, la IA se convertirá en una gran ventaja a la hora de publicar noticias con rapidez. La agencia de noticias Press Association ya ha adaptado la IA a sus flujos de trabajo, en colaboración con el medio de comunicación basado en datos Urbs Media, para ofrecer cientos de historias semiautomáticas a clientes locales.
El valor de la IA
El potencial de la IA ya está empezando a demostrarse: otra investigación reciente de TV Technology reveló que dos tercios de las organizaciones que han probado la IA, han implementado la tecnología en al menos una función básica de su flujo de trabajo. La IA revolucionará inevitablemente el sector de las emisiones en un plazo de 5 años. Especialmente en un sector donde mantenerse al día con los últimos avances tecnológicos resulta fundamental para crecer y atraer al público.
Las decisiones empresariales impulsarán de forma natural la necesidad de IA y, a su vez, la IA empezará a impulsar la toma de decisiones empresariales. ¿En qué aspecto de la IA debemos centrar nuestra atención en estos momentos? En el desarrollo de tecnologías utilizando expertos en materia que consigan una mejor inteligencia para ofrecer a los clientes los contenidos enriquecidos que buscan. Debemos dejar a un lado las preocupaciones comunes sobre los cambios en el modo de trabajar y apostar por el valor de la IA para entender aquello que puede aportar en el futuro y que no es posible en la actualidad.